Soy admirardor de la obra de Malena Pire, pero teniendo en cuenta que ¨las obras del espíritu sólo existen en acto¨, soy más admirador de ella trabajando: o sea, de su concentración, su obsesión, su singular método, su libertad interior, su seguridad respecto a sus objetivos, su permanente búsqueda.
Sus obras son las huellas de ese estado de trabajo que ella vive. No espera la inspiración. Como un desarrollo lógico una obra la intruduce en la siguiente, pero puede llegar a convivir con dos o tres experiencias de metodología diversa, pero de una lógica interior común.
La conozco desde hace cinco años y he visto su evolución a partir de sus dibujos simbolistas hasta sus cuadros objetos y sus relieves de hoy. Una misma identidad formal, pero un desarrollo poético que se agiganta y se refleja en lo físico, o sea, en el tamaño.
Barroca sin duda pero al mismo tiempo sabe ser austera como lo muestran sus últimos cuadros blancos y negros. Pero es austera a su manera.
No conozco obras de su otra activida -arquitecta paisajista- pero estoy seguro que lo hace con el mismo espíritu de su obra plástica, porque su coherencia es indudable a pesar de los cambios.
La envergadura que ha tomado su obra ya la coloca como una artista mayor a pesar de su juventud. Me alegra que comience a exponer por ellla y por el público, porque las obras del espíritu también existen en el acto de contemplar.
Inevitable Metamorfosis hacia el Ser
Galería de arte Chacabuco
enero 2006
